Sylvester Enzio Stallone, mejor conocido como Sylvester Stallone, nació en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, el 6 de julio de 1946.
Su padre fue Frank Stallone, un peluquero originario de Italia, y su madre, Jacqueline France Labofish, una corista y trapecista, que tuvo problemas durante el parto que traería al mundo a la futura estrella de la actuación.
De hecho, Stallone tiene esas características tan únicas del labio caído y el habla levemente arrastrada, debido a complicaciones en el alumbramiento que obligaron a los médicos a usar un par de fórceps que ejercieron demasiada presión y causaron un accidente que derivó en dicha condición.
Sly tuvo problemas durante su niñez y adolescencia sobre todo con su padre, sin embargo eso lo hizo poder superar todas las pruebas que lo llevaron a convertirse en el hombre musculoso y trabajador que todos conocemos.
En alguna ocasión un periodista dijo que, “Sylvester no había nacido con mucho cerebro por lo que prefería desarrollar su cuerpo”, a lo que el actor contestó:
Stallone: la actuación es un “modo de vida”
Stallone asistió a la escuela en los suburbios de Filadelfia, donde comenzó a actuar y también se convirtió en un jugador de futbol estrella. Luego pasó dos años dando instrucciones en el Colegio Americano de Suiza en Ginebra.
Al regresar a los Estados Unidos, se matriculó como dramaturgo en la Universidad de Miami y también comenzó a escribir.
Stallone dejó la universidad para seguir una carrera como actor en Nueva York, pero los trabajos no fueron fáciles. En 1973, había hecho una audición para casi todos los agentes de casting en la Gran Manzana y había realizado miles de llamadas de actuación, con poco éxito.
No obstante, comenzó a canalizar sus frustraciones para escribir sus propios proyectos, uno de ellos sería el multipremiado boxeador «Rocky Balboa».
Sylvester Stallone, “el ojo del tigre”
“Rocky” nació, literal, de la mano del propio Stallone, pues fue él quien escribió el guión. Varios productores se ofrecieron a comprar el libreto, con la intención de elegir una estrella para el papel principal, que Sly insistió en interpretar. Aunque su saldo bancario era de apenas 100 dólares, él se mantuvo firme con su perseverancia hasta que finalmente dio frutos.
La estrella ha actuado en películas a lo largo de más de 30 años de carrera, e incluso ha escrito y dirigido algunas de ellas. También lanzó un libro de ejercicios y tiene su propia compañía de promoción de boxeo.
Fuente: Uno.tv