La chaqueña tiene 9 años y sus videos son furor en las redes sociales. Necesita dos pasajes de avión para competir en el torneo de boxeo infantil más importante del mundo, The Boxing Golden Gloves.

Por Adrián Michelena / Enganche

Desireé Brítez le pega a unos neumáticos viejos que están apilados. No hay dinero para comprar bolsas de boxeo. Su papá, Juan Brítez, es entrenador y tiene un gimnasio en la localidad chaqueña de Puerto Villegas. Allí las paredes respiran humedad y se levanta la cal del piso. Pero poco le importa, porque para ser un grande no se necesitan grandes cosas. La pequeña saca un ganchazo y una goma vuela para un lado. “Bien Daysi”, le gritan. Y enseguida otra más también sale eyectada de la hilera. “Cómo pega, tiene un puñal en la mano”, murmuran algunos. Es que en realidad Desireé no es una nena como cualquiera. A los 9 años ya fue invitada al The Boxing Golden Gloves, el torneo de boxeo infantil más importante del planeta, que por primera vez en la historia se celebrará en Nueva León, México, del 24 de 27 de octubre. “No la queremos ilusionar, porque la verdad es que no tenemos el dinero para viajar. Estamos pidiendo para costear los pasajes y para que La Metralla pueda cumplir su sueño”, comenta el padre y formador de la pequeña.

En el día a día, según cuentan, la pequeña Brítez es más La Metralla que la Dulce Desireé. Esta nena de escuela primaria no juega a las muñecas, ni mira programas infantiles; un dibujo animado no la motiva, será que ella ya es su propia heroína. “Se la pasa andando en bicicleta o jugando a la pelota. También hizo kick boxing y taekwondo, pero ama el boxeo. De hecho, ya tiene 110 presentaciones en el país y 3 en el exterior. Ahora le llegó la invitación de este torneo y queremos que esté. Ya me dijo que quiere saludar al Canelo Álvarez”, agrega el padre, en charla telefónica con Enganche. “Voy a traer el cinturón a la Argentina”, arremete la nena, que escuchaba la conversación de fondo. La familia tiene tiempo hasta el 21 de octubre para viajar y gestionar los pasajes y los pasaportes. Necesitan 2.500 dólares (145.000 pesos argentinos) para el avión. Y no pierden las esperanzas. Por eso, dejan su número de teléfono para colaboraciones.

No es normal, ni común, ni corriente, que una nena de 9 tenga tanto bagaje en su repertorio. No tiene edad para haber aprendido tanto. Son 28 kilos de explosión. Por algo, José López, director de The Boxing Golden Gloves, la invita a su torneo, en donde compiten 1500 boxeadores de todo el mundo. Ella aprendió a boxear a los 4, cuando cruzó guantes con un pequeño misionero, en una exhibición en Formosa. Y de ahí no frenó nunca. Estuvo con La Tuti Bopp, conoció a la Locomotora Oliveras. También viajó a Paraguay invitada para realizar tres presentaciones en la playa. Y despertó el interés y el asombro de los grandes campeones mundiales. Sergio Maravilla Martínez, con un par de videos que vio, detectó el talento: “Tiene unas condiciones tremendas, parece ser una máquina de verdad, promete porque tiene potencia y explosividad, tiene desplazamiento, tiene un montón de cosas, hay que ser profesional y experimentado para hacer sombra como hace ella”.

Desireé sueña con ser como la Tutti Bopp, de hecho, entra y sale porque su papá le enseñó que ese estilo es el que mejor le conviene. “Mi nena entrena una hora y media por día, y en ninguna exhibición salió lesionada, eso quiere decir que el boxeo es peligroso si uno pelea en terreno del rival”, agrega Juan, un electricista, que vive de changas y de su trabajo en el gimnasio. A pesar de vivir al día, Juan no aceptó las ofertas que le hicieron. Lo tentaron con un contrato por 10.000 pesos mensuales para pelear en un organismo no afiliado a la Federación Argentina de Boxeo (FAB). Y hasta quisieron pagarle por peleas clandestinas. “Le daban 7.000 pesos a la nena para ir a fajarse a Mendoza, en una entidad paralela, pero yo no quise”, detalla. La oferta que sí aceptó fue la de Corti, la empresa de los grandes campeones, que le fabricó guantes especialmente para La Metralla. “Los amigos de Corti nos mandaron de regalo guantes y cabezales y a partir del caso de Desireé lanzaron la línea Junior porque se dieron cuenta de la gran demanda de boxeo infantil que había”.

En el país, el boxeo femenino está en auge, y ya sacó más de una decenas de campeonas. Sin embargo, la FAB sólo permite en su reglamento convertirse en amateur a partir de los 14 años. Desireé es seguida de cerca por la gente de la FAB, por medio de su presidente Luis Romi, y de los entrenadores de la Selección. Pero deberá esperar unos años más para boxear oficialmente. En México la situación es distinta: hay casos de nenes de diez años que ya debutan en el amateurismo y a los 15 en el profesionalismo. La Metralla, mientras tanto, boxea para las redes sociales. Allí provoca asombros con los videos que cuelga su papá. Pega y esquiva. Pega y esquiva. Y sigue divirtiéndose a las trompadas, haciendo volar neumáticos abandonados, ruedas que para muchos no servirían para nada. Ahora sólo espera la oportunidad de viajar a México para poder demostrarle al mundo toda la riqueza de su talento.

Para colaborar con la Metralleta Brítez:
Whatsapp: +549-1169717848