Mike Tyson contra Evander Holyfield sería hoy una pelea de exhibición soñada dentro del formato de boxeo de leyendas. El éxito rotundo de las dos peleas entre Julio César Chávez y el Travieso Arce nos anima a pensar que hay otras peleas de exhibición que pueden hacerle erizar la piel a los aficionados.
Y una de esas peleas que es capaz de erizar la piel de los aficionados al boxeo de nostalgia puede ser la de Mike Tyson y Evander Holyfield. Tiene todos los ingredientes para que todos los ojos de los aficionados al boxeo se claven un sábado en ese ring, para ver esa pelea.
QUEDÓ UNA ÚLTIMA IMAGEN BOCHORNOSA
La últimas imágenes que tenemos de Mike Tyson y Evander Holyfield juntos arriba de un ring es una de las más desafortunadas en la historia del boxeo. Tyson mordiendo la oreja de Holyfield, quien salta de impotencia y coraje, mientras que la oreja, ya incompleta, chorrea sangre por el ring.
Tyson, descalificado, aún violento sobre el ring, y un escuadrón de policías que se miran unos a otros, tratando de ver quién es el que se atreverá a detener a Mike, que está como una bestia enardecida y quiere ir a golpear a Holyfield.
Los narradores no pueden creer lo que acaba de pasar, lo dicen una y otra vez. El espectáculo es vergonzoso.
Esas escenas bochornosas son las últimas que tenemos de Tyson y Holyfield enfrentándose sobre el ring.
UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD
Tanto Evander Holyfield como Mike Tyson se han dado una segunda oportunidad a sus vidas luego de retirarse como peleadores en activo. Tyson, particularmente, se ha dedicado a reflexionar sobre el hombre que fue, y ha buscado darle un nuevo sentido a su vida.
Con humildad, Tyson le ha ofrecido disculpas varias veces a Holyfield. Han hecho comerciales, y apariciones juntos. Holyfield ha estado como invitado en el podcast de Tyson. Y Mike no se ha cansado de decir cuánto lamenta lo que pasó aquel 28 de junio de 1997, y cuánto aprecia el haber podido competir con Holyfield en su tiempo.
Ha pasado mucha agua bajo el puente, y ambos peleadores parecen haberse reconciliado con su pasado. Por lo tanto, una pelea de exhibición entre ambos, es una oportunidad inmejorable de verlos hacer sparring, de verlos combatir amistosamente de nuevo.
Es darles a ellos, y darnos a nosotros, la oportunidad de quedarnos con una última imagen que sea distinta a la de la mordida. Y esa nueva imagen, sin duda, será la de verlos darse un abrazo al final de esa pelea de exhibición.
TODOS LO VERÍAN
La mordida se quedó en el imaginario de todos. Lo primero que cualquier aficionado casual al boxeo asocia con Mike Tyson es la mordida, y no el hecho de haber sido el campeón pesado más joven de la historia. Pasan por alto el enorme talento y furia que Mike Tyson desplegaba en su boxeo.
Si un día se anuncia una pelea de exhibición entre Mike Tyson y Evander Holyfield no debemos tener duda que sería uno de los eventos de boxeo más grandes en el año. Podría cargar con una cartelera y volver a llenar una arena en Las Vegas.
Esta pelea de exhibición entre Mike Tyson y Evander Holyfield sería casi tan grande como cualquier pelea estelar de mayo o septiembre. Habría mucho morbo e interés de verla, y la mejor forma de combatir ese morbo, es ver a estos dos hombres reconciliados dándose un abrazo fraternal sobre el ring.
Ese sería el mejor cierre que podría tener esta saga que marcó la década de los 90 en el boxeo.
Izquierdazo.com