En una nueva victoria de Anthony Joshua volvió a viejos lugares en donde ya estuvo en su carrera. Un nuevo triunfo pero de nuevo vimos fallas. ¿Le alcanza para vencer a Tyson Fury?
Por FDGotelli
En una nueva victoria de Anthony Joshua volvió a viejos lugares en donde ya estuvo en su carrera. Un nuevo triunfo pero de nuevo vimos fallas en el trabajo del inglés que llevó el combate a prolongarse más de la cuenta.
Luego de un 2019 complicado, con una derrota y una trabajada victoria ante Andy Ruiz, donde tuvo que aplicarse un plan por demás restrictivo para evitar contacto. Quedaba ver que Joshua encontraríamos en este encuentro.
En el primer tercio de combate encontramos a un Joshua totalmente apegado a un plan. Mucho jab, movimiento y buscar que claramente los 37 años de su rival Kubrat Pulev empiecen más temprano que tarde a pesar. En ese momento nos hizo acordar a su pelea con Joseph Parker o contra Andy Ruiz en Arabia, un Joshua pegado a su libreto que no daba un paso en falso.
En el cuarto asalto Joshua apretó el acelerador como en tantas otras noches en el Reino Unido y marcó dos caídas. Pero lejos siquiera de finiquitar la faena el británico se volvió improductivo. Por momento cansado sin aire para poder apretar el acelerador algo que vimos en otras veladas cuando tumbó a Klitschko y se quedó sin gas varios rounds. Tras unos asaltos flojos en el octavo mejoró y en el noveno pudo terminar la tarea. Un uppercut (una tradición que empezó con Dillian Whyte) en la primer caída y un uno- dos fulminante fue demasiado para la humanidad de Pulev. El árbitro le contó a diez formalmente para terminar el encuentro.
Sin dudas AJ es un ídolo de barro, no es la primera vez que parece quedarse a medias (podemos recordar el nocaut a Alexander Povetkin que fue bastante similar a este) y siempre hay alguna complicación que hace que quede su victoria con sabor agridulce.
No es fácil ser Joshua, tras cuatro caídas que le dio a su rival y sin siquiera ser tocado fuertemente y aun así las críticas no bajan. Incluso las bromas de un profesional como Tyson Fury, que se mofó públicamente. El descendiente de nigerianos moldea con su sonrisa, su honestidad y carisma las criticas pero no hay con que darle a la situación.
El próximo año se torna antojadizo en que tiene que estar al frente de Tyson Fury o de Deontay Wilder. Ya no hay plazo, si bien Fury venció a Wilder de forma incontestable el norteamericano quiere la revancha si o si, es lo único que puede sacar al rey gitano de un combate con Joshua. Por su parte AJ, tiene varios títulos peso pesado en su haber y si no hay súper pelea, las entidades del boxeo buscaran proponer sus peleas mandatorias.
Como dato a color para estos lados, la pelea no se vio en TV. La OTT DAZN acaparó la transmisión tanto en inglés como en español. Este humilde servidor la observó desde su celular sin sobresaltos ni cortes aunque varios señalaban en las redes que hubo cortes. Una pena que ESPN Knockout que acaparó muchas veladas.
De hecho este finde pasó una en el país (con Jeremías Ponce en una fea victoria ante Jonathan Enniz) y una de PBC (Colbert-Arboleda) algo que viene haciendo con continuidad también en las peleas que DAZN producía en EEUU.
Pero lamentablemente este 2020 no va a terminar para nada bien y además que Joshua-Pulev, GGG-Szeremeta y Canelo-Smith se transmitirán por la APP.
Una nueva victoria de Joshua, algo que nos tiene acostumbrado. En el pleito aparecieron varias versiones del campeón algunas de las buenas y algunas de las malas pero aun así no parece convencer a nadie que pueda alguna de ellas sea lo suficiente buena para superar a Tyson Fury ni siquiera para alcanzarlo.
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